Principales características del Silestone

Bienvenido un día más al blog de Cocinas y Mármol, en la nueva entrada de hoy hablaremos sobre cuáles son los orígenes y las distintas características que ofrece el Silestone a la hora de utilizarlo como material de revestimiento de nuestra encimera.

Es importante conocer las prestaciones del Silestone antes de utilizarlo en nuestra cocina, y sobre todo, de realizar su mantenimiento y limpieza. Si somos conscientes de sus cualidades, podremos aprovechar nuestra encimera al máximo y nos durará muchos años en perfecto estado.

¿De qué está formado el silestone?

El Silestone está formado por un 94% de cuarzo compacto, el porcentaje restante pertenece a resinas especiales y otros componentes que le aportan numerosas cualidades y prestaciones perfectas para nuestra revestir nuestra encimera.

Este material se puede utilizar para el revestimiento de distintas superficies, tales como encimeras de cocinas, baños, suelos y todo tipo de paredes. Esto nos dice que el Silestone es un material muy resistente y versátil para utilizar en nuestra vivienda.

¿Cuáles son las características del Silestone?

Los materiales con los cuales se fabrica el Silestone le otorga unas características muy ventajosas, que hacen que este material sea perfecto para revestir la encimera de nuestra cocina, así como otros elementos de nuestra vivienda.

La primera característica a resaltar del Silestone es su gran resistencia a las manchas. Esta superficie es perfecta para revestir nuestra encimera porque, al no ser porosa, no permite que las machas entren y sean difíciles de eliminar. Además, resiste productos tan agresivos como café, vino, zumo de limón, aceite de oliva, vinagre, etc.

Una característica de la cual no disponen todos los materiales de revestimiento de encimeras es la resistencia al ácido. Tratándose de la cocina, lo cierto es que es necesario que el material resista todo tipo de alimentos y productos ácidos, tales como el limón. De todas formas, debemos tener cuidado con estos productos, ya que a alargo tiempo le pueden restar brillo a nuestra encimera.

Por otro lado, las encimeras de Silestone disponen de una gran resistencia al impacto, de esta forma podremos colocar todo tipo de utensilios de cocina en su superficie y no se dañará. Esta gran resistencia se consigue gracias a su alta composición en cuarzo y resina de poliéster, que le otorga, también, elasticidad.

Finalmente, podremos cocinar y realizar todo tipo de actividades sobre nuestra encimera sin tener que preocuparnos por qué se raye, las encimeras de Silestone resisten perfectamente a las rayadas de todo tipo de elementos y utensilios.

CONSEJOS PARA ELEGIR EL COLOR DE UNA PIEDRA NATURAL PARA TU COCINA

Cómo ya sabréis, en cuánto a piedras naturales, existe una gran variedad de tipos y colores. Las más utilizadas en decoración suelen ser el mármol, la pizarra o el granito.

Ante la amplia gama, a veces podemos dudar o no terminar de decidirnos, ya que no tenemos las herramientas para saber cuál es la mejor opción para nuestro espacio.

Cuando instalamos estos materiales, en enumeradas ocasiones pretendemos que la piedra combine con el color de nuestras paredes, muebles u objetos. No es ilógico que en lo primero que pensemos sea en eso, pero debemos tener en cuenta que son factores que cuando queramos cambiar el aspecto del espacio, podremos mover o cambiar y que normalmente suele ser más económico que el cambio de la piedra natural.

Por lo que antes de instalar el mármol, pizarra o granito en nuestra cocina deberíamos reconsiderar todo el espacio, y no únicamente suelos y encimeras.

COLOR, LUZ Y COMBINACIÓN

Para empezar, debemos elegir el color de la piedra y tener en cuenta su significado y efecto, sin preocuparnos por como combinará. Para ello consideraremos el significado del color, ya que éste juega un papel principal en el nuestro ánimo y en cómo nos sentiremos cuando estemos en el interior del espacio. Por ejemplo, los tonos azules y verdes tienden a dar una sensación de amplitud y formalidad. En cambio, los colores cálidos como el rojo, amarillo o marrón, crean una cocina más acogedora.

En relación a los colores, podemos jugar con la luz natural. Si elegimos colores contrarios al espectro de luz, eso hará que la cocina tenga un aspecto más sofisticado y equilibrado.

A continuación, seleccionaremos el color del resto de la cocina dentro de la misma familia de colores. Por ejemplo, podemos escoger que el color que predomine sea el de las paredes y muebles y que sea la encimera la que le dé un toque.

Sea como sea, debes tener en cuenta que si no te gusta la primera opción que has elegido para el color general de la cocina puedes cambiarlo y te sentirás mucho más satisfecho si escoges un color de piedra natural que te guste.

¡Crea tu combinación perfecta y dale un estilo único y diferente a tu cocina!